El día está perfecto para salir a caminar un poco, me siento con ganas y he pensado que me voy a callejear un poco por Barcelona, cojo el metro para saber si me interesaría Vivir en Sagrada Familia.
Como ya es habitual voy sin rumbo, mirando a los lados y hacia arriba, para ver como son aquí las cosas y cómo está el mercado inmobiliario del barrio de Sagrada Familia.
El barrio de Sagrada Familia tiene mucha historia, muy diferente que nuestra anterior parada de Vivir en Diagonal Mar.
El barrio de Sagrada Familia está situado en el extremo derecho de l’Eixample, en la parte alta.
Antes conocido como el Barrio de Poblet, era un vecindario de campos y casas bajitas entorno a la actual Calle Valencia.
Lo que le dio personalidad y nombre al barrio fue el encargo de construir en 1881 el templo por todos conocido, La Sagrada Familia.
Actualmente el barrio incluye el vecindario de los Encants por el extremo inferior.
El barrio de Sagrada Familia es uno de lo barrios elegidos por miles o cientos de miles de personas para vivir en la ciudad de Barcelona.
Está en el puesto número 22 en el rango de barrios más caros de la ciudad de Barcelona – con un total de 73 Barrios.
Es una de las mejores zonas para vivir si lo que quieres es estar bien comunicado y mantener una esencia de barrio con historia y tradición.
El mercado inmobiliario de Sagrada Familia destaca por sus pisos grandes, de los de antes. Con muchos metros cuadrados y unos interiores que tienen mucho juego.
Los mejores pisos en Sagrada Familia son grandes, espaciosos y, algunos, mantienen techos altos. De la época en que las familias tenían más de un hijo y apostaban por vivir en una ciudad y no abandonar la comodidad de un piso grande y espacioso.
Además de eso, mucho cuentas con balcones en las partes traseras, con vistas a la ciudad y a patios – más bien mega patios interiores – que quitan el hipo.
Nada más salir del metro me doy cuenta que aquí todo tiene su historia.
Me han dicho que en este barrio todavía puedo encontrar tiendas y negocios de toda la vida, con solera y con una historia a sus espaldas.
Mi intención hoy no es ir a la basílica de la Sagrada Familia, eso está lleno de turistas y hoy quiero algo más cercano.
He salido de casa sin desayunar y tengo hambre, así que hoy comeré caminando.
Veo un lugar que parece tradicional, lo que estoy buscando, se llama Cal Sardà y parece que me voy a poner la botas.
Entro y espero a que la tienda se vacíe, es difícil porque entra y sale gente constantemente. Yo me excuso diciendo que me lo estoy pensado…mentira!
Voy a coser a preguntas a la dependienta. Al rato, y después de para la conversación unas cuantas veces, saldo de allí con algunas cosas.
La tienda se remonta a los años 30 y en sus inicios era una lechería, desde entonces han pasado muchos años y la tienda se ha reformado manteniendo su esencia inicial.
Pero lo mejor es que os deis una vuelta por allí.
Doy media vuelta y me voy hacia arriba, me han dicho que el mercado municipal es un lugar de ebullición en el que podré ver gente de toda la vida haciendo la compra.
Me apetece tomarle el pulso al barrio y ver por dónde se mueven los old school del barrio. Las señoras y señores de toda la vida de +50 o 60 años.
Su construcción data de 1993 así que no espero encontrarme frente a un edificio antiguo de los años ’50.
Dentro veo un montón de tiendas de las de antes – el olor a encurtidos se adentra en mi y me recuerda que todavía no tengo planteada la comida del medio día.
Perfecto, esta noche voy a cenar ensalada de tomate e higos, así que hago mi lista mental y compro.
Eso se pica todo y se presenta like ensalada. Parece que no, pero está muy buena.
Salgo de allí con una bolsa y respiro hondo. Podría acostumbrarme al barrio, Vivir en Sagrada Familia es una buena elección.
Mientras voy dirección al metro, me cruzo con una señora que habla por teléfono.
Me acerco y le pregunto….
En nuestra siguiente salida, descubriremos el lugar al que la señora se refería y no voy a desvelar nada más.